Corría el 2005, aquellos años de escuela y niñez que se mezclaban con un gusto amargo quizás del propio crecer. Eran épocas que transcurría desde el colegio a casa, en un colectivo ruidoso y maltrecho que recorría la mitad del casco urbano. Surgían como fotogramas inconclusos en el paisaje. Con la mirada veloz, parecían reales. Su impronta negra y remarcada, con el tamaño de una bicicleta real, me confundía con productos del mercado. Pero eran stencils.
Se transformó en un juego. Recorrer la ciudad ahora consistía en encontrar las bicis restantes. ¿Quién las había pintado? ¿Por qué estaban allí? ¿Qué significaban?. Durante años fueron parte de la ciudad. Inmóviles, en silencio, nadie sabía pero nadie las tapaba. Se ubicaban en escuelas, instituciones y por último, en el Museo de la Memoria, donde quedó una bicicleta, hasta hace poco.
Con el tiempo y por medio de internet, pude informarme acerca de las plantillas y su significado inicial. Antes de seguir, es interesante saber que una plantilla (stencil en inglés) consiste en un material bastante rígido pero con la suficiente flexibilidad para ser transportado fácilmente. Este suele ser una radiografía que se perfora para dibujar siluetas, por las cuales se pasa pintura encima para reproducir una imagen sobre una superficie. Esto permite una producción en serie, muy eficaz a la hora de utilizarlo en la calle.
Dentro del street art, es común la utilización de esta técnica con aerosol, debido a la durabilidad en los muros y la facilidad de aplicación de la técnica.
Stencil en un muro de Rosario, obra original de Fernando Traverso.
Para mi asombro, googleando sobre las bicicletas, me encontré con un articulo en Wikipedia que explica la producción en serie de Fernando Traverso, llamada las bicicletas de Rosario. Esta obra fue ampliamente distribuida en "lugares en los que hubo episodios relacionados con la desaparición de personas". Atribuido este hecho a la desaparición de 350 estudiantes de la Universidad de Rosario debido a la dictadura militar del '76.
Considerando el trasfondo histórico de la bicicleta como imagen potenciadora de significados y luego de investigar sobre la función del stencil, es interesante observar que se ha repetido esta serie, en nuestra ciudad.
Entendemos que la dictadura ha estado presente en cada ámbito de nuestra vida, en cada lugar del país. Las bicis son una muestra de aquella presencia que hoy, se encuentra ausente. Una huella del recuerdo, un signo de la carencia humana. Pocas quedan hoy en Resistencia, o casi ninguna, de aquellas bicicletas del dolor y la angustia. Una reflexión sobre como el street art puede plasmar no solo expresiones alegres o "fáciles de disfrutar" como dice el autor Javier Abarca (2010) sino también narraciones de la historia, de lo propio y de la fragilidad de la vida.
Museo de la Memoria, en Marcelo T Alvear 32, Resistencia.
Detalle del stencil, Resistencia.
Redacción e idea: Indiana Got
Bibliografía consultada:
- Las bicicletas de Rosario, articulo en Wikipedia. Recuperado de:
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